... Definitiva como un mármol
entristecerá tu ausencia otras tardes
--JLB, Despedida
Querida mía:
Quizá debería escribir "Hola" o "..." o, incluso, poner la fecha. Anytown, America, a 12 de marzo de 2009. Siendo la primera carta que te escribo, puedes creer que me encuentro nervioso como cualquier escuincle de secundaria que le habla a la muchacha que le gusta. Porque, si bien no tengo pruebas de que existes, tampoco puedo descartar que ya te haya conocido. Por ahora, puedes creer que no lo sé.
Te he cambiado de nombre varias veces ya. La primera vez te llamé Irma Regina, después fuiste Catarina, luego Martha, Maricruz, Carmen, Gabriela... ¿alguna vez has sido tú? Desde luego, no puedes saberlo, ni yo tampoco. Pero déjame contarte que soy un coleccionista de preguntas vanas. Preguntas como "¿dónde estás?" o "¿cómo estás?". ¿Tienes tú preguntas vanas?
Estoy en un lugar distinto ahora, distante de donde podría encontrarte, pero a veces miro por encima de mi hombro para ver si algo me indica que estás cerca. No sé nada de ti, así que no estás obligada a hablar ninguna de mis lenguas, no estás obligada a venir de donde vengo o a mantenerte lejos de donde estoy. Claro que, si extiendo lo que digo, no estás tampoco obligada a existir fuera de mi falaz esperanza.
Quizá te preguntes alguna vez por qué te he escrito. Es porque estoy viviendo una especie de sueño. Todo lo que me rodeaba se ha convertido en imágenes en mi cabeza, voces en un altavoz, colecciones de caricias que ya no vienen de otros labios... todo aquello ya se ha vuelto abstracto. Me siento suspendido mientras todo lo demás se mueve, mientras todos los demás cambian y maduran, tienen hijos y envejecen.
Déjame concluir esta carta, diciéndote que pienso mucho en ti. Eres como una gran caja de sorpresas, que podría contener una realidad patente, un gato vivo o muerto (cosa de incertidumbre, ya sabrás), o una falazmente rotunda nada. Quizá algún día me dé cuenta de que la pregunta que representas no tiene respuesta. Pero aún así, te extraño.
Sterling
Vancouver, WA, 12 de marzo de 2009, 12:20pm PST
Auchh, me pierdo!!! no se a dónde poner mi comentario si en el blog o en el comentario, es posible que no deba hacerlo, por los vínculos que hay entre ustedes dos, pero las letras de tu blog las conozco, claro con otros nombres. El comentario estupendo. Me hace recordar el existencialismo de Kierkegaard en su ´Diario de un seductor ´ ?, cuando Cornelia o Cordelia (importa un bledo el nombre) escribe "soy tuya, soy tuya...soy tuya..." casi hasta en infinito y más allá. Enredo entre lo estético y lo ético, que a final de cuentas es ese el laberinto en el que todo ser humano se pierde. No sé en que parada se da esa introspección, pero a todos nos toca sentarnos en la silla del confesionario.Te envío un cálido abrazo. Cambio y fuera.
ResponderBorrarPues bien, sepa Flo que, en aras de la celeridad, he enviado su comentario a la destinataria. Me parece que a la destinataria no le molestará el comentario que, en todo caso, es pertinente. Nos leeremos en otra ocasión.Fu-Manchú
ResponderBorrarGracias Flo, por el comentario... no me molesta... más bien me avergüenza... :-S no estoy acostumbrada a que se me compare con nadie más y mucho menos con un personaje de un libro... y luego acá... menos... :-P Me voy por el momento. El abrazo es reciproco. Besos!
ResponderBorrarHola:Te extraño, pero conociendote no creo que vuelvas, por eso en las llamadas mi tono es neutral no quiero demostrarte algun sentimiento tal vez por miedo, tal vez por proteger todo lo bueno que dejaste en mi... es extraño las mujeres que te amamos en algun momento de tu vida deseamos hijos de ti, pero no se de quien realmente los desearias tu. Sabes, cuando escribes asi me recuerdos cuando empezamos a andar,. siempre buscando respuestas a todo y me hacia feliz ese constante preguntar hacia todo, de hecho siempre has sido asi desde que te conozco. Muchas noches te extraño y me pregunto que harás mientras yo duermo con alguien que no eres tu y ella ... ella se pregunta lo mismo. No se si soy yo a quien buscas, pero por mucho tiempo senti que lo fui y eso me hace feliz.Cuidate mucho ok?Besos
ResponderBorrarY kaze siguio diciendo:
ResponderBorrar¿Preguntas vanas como: ¿me extrañas? ¿Me piensas? ¿Crees que soy yo? ¿Crees que… eres… tú? ¿Crees que alguna vez estaremos juntos?? ¿Preguntas como esas? Sí, las tengo… y son vanas no porque no tengan respuesta sino porque me has cambiado el nombre varias veces y dudo simplemente que sea yo a quien buscas… mi sentirme poco no me permite asegurarlo… mi respeto a ti y a lo que buscas y quieres, tampoco.¿Y que pasaría si te dijera ¡soy yo! ¡soy yo! por qué lo siento? ¿Me creerías? ¿Alguna ves “he sido yo” dentro de tu corazón? ¿Verdaderamente YO? Con mis desventajas y mis defectos que no te parecen, con las cosas que no puedes aceptar… con nuestra lejanía… con nuestra indecisión… con nuestros miles de desprecios… ¿Alguna vez he sido yo?Hace mucho me despedí de tu idea y voltee a ver al hombre. Ese hombre que justo encajaba con lo que quería pero era a la vez tan diferente…
Y siguio kaze motivando el comentario de Flo
ResponderBorrar¿Sabes? Era como si me hubieran platicado que conocería a alguien con tales y cuales características y al encontrarlo encajaba pero venía adornado con otras tantas cosas… Imaginate que te dijeran que te dejaron un paquete en casa de alguien pero cuando fuiste a recogerlo ese alguien quiso llevártelo y se cruzaron en el camino por lo que tu paquete no te fue entregado. La persona se lo deja encargado a alguien en tu casa pero tu no vuelves a ella por mucho tiempo porque algo te paso camino allá. Entonces un niño encuentra el paquete y empieza a jugar con él y le desgarra la envoltura, un adulto se lo quita y lo pone donde nadie lo localiza inmediatamente,Después de un tiempo la persona que te dejo el paquete te pregunta que te ha parecido lo que te dejo, pero tú no has tenido en tus manos nada por lo que no tienes una respuesta. Entonces comienzan a describírtelo y tú te haces una idea de lo que es, te platicaron de cómo estaba envuelto, el tipo de caja y demás y empiezas por ahí. La cosa es que el paquete ha ido rolando por muchos lados y ha ido cambiando: la caja está abollada, ya no tiene envoltura, algo del contenido ya se rompió… y simplemente ya no encaja con la idea que tenias de él… ni al principio, pero ahora las descripciones más certeras para encontrarlo han desaparecido. ¿Qué pasaría si lo hallaras un día? ¿Tendrías la certeza de que es lo que buscas?Yo me he llenado de preguntas vanas y entonces pienso que todo lo que siento es producto de mi imaginación. Pero te encontré y descubrí que “eras tú” y que habías rolado por muchos más lados… que fuiste niño, que reíste, que jugaste, que lloraste, que te convertiste en un joven, que estudiaste, que amaste, que has vivido… y yo no había estado ahí… pero eras tú! Y quise conocerte… y he disfrutado lo que se me ha permitido conocer.Ahora, contigo lejos, ya no busco: para mí sigues siendo el padre de mis hijos… hijos que tal vez nunca nazcan, hijos que tal vez, en unos años, cambien de rostro y no guarden ningún parecido contigo pero que en mi corazón tendrán algo de ti, hijos que tal vez no quieras conocer, pero tuyos al fin por ser parte de mí.Cosas raras: te dejo en paz no porque te olvide… sino porque quizá es mucha mi presunción de creerme tuya, de ti y ser justamente yo, así pues me guardo lo que siento percatándome de la realidad: no tengo dinero para ir hacia donde estás… no tengo los huevos para dejar todo por acá, es más: me enredo más en mis desmadres, pero al fin sigues existiendo y es lo que más me importa, no el que estés a mí lado, aunque sí, no lo niego, quisiera que estuvieras.Ahora bien, tu vida sigue transcurriendo tal como la mía: no te quedas atrás, estás haciendo lo tuyo y por ser precisamente tuyo te parece un sueño, no te quedas atrás y sé que te volveré a ver. Tal vez tardes mucho, pero que más da: sé que pasara. Una de mis motivaciones para hacer mis cosas es saber que tú las conocerás desde allá y será como si un pedacito de mí viajara a verte. Mientras tanto igual y siga sin ser yo… tal vez volveré a cambiar de nombre y entonces para ti me convierta en definitiva, tal vez me bautices “Mary”, pero mientras eso sucede puedo decirte, dirigiéndome al hombre y a la imagen que de él cree: yo también te extrañoDesde algún lugarYo
Y siguio diciendo Kaze mtivando el comentario de Flo
ResponderBorrar¿Sabes? Era como si me hubieran platicado que conocería a alguien con tales y cuales características y al encontrarlo encajaba pero venía adornado con otras tantas cosas… Imaginate que te dijeran que te dejaron un paquete en casa de alguien pero cuando fuiste a recogerlo ese alguien quiso llevártelo y se cruzaron en el camino por lo que tu paquete no te fue entregado. La persona se lo deja encargado a alguien en tu casa pero tu no vuelves a ella por mucho tiempo porque algo te paso camino allá. Entonces un niño encuentra el paquete y empieza a jugar con él y le desgarra la envoltura, un adulto se lo quita y lo pone donde nadie lo localiza inmediatamente,Después de un tiempo la persona que te dejo el paquete te pregunta que te ha parecido lo que te dejo, pero tú no has tenido en tus manos nada por lo que no tienes una respuesta. Entonces comienzan a describírtelo y tú te haces una idea de lo que es, te platicaron de cómo estaba envuelto, el tipo de caja y demás y empiezas por ahí. La cosa es que el paquete ha ido rolando por muchos lados y ha ido cambiando: la caja está abollada, ya no tiene envoltura, algo del contenido ya se rompió… y simplemente ya no encaja con la idea que tenias de él… ni al principio, pero ahora las descripciones más certeras para encontrarlo han desaparecido. ¿Qué pasaría si lo hallaras un día? ¿Tendrías la certeza de que es lo que buscas?Yo me he llenado de preguntas vanas y entonces pienso que todo lo que siento es producto de mi imaginación. Pero te encontré y descubrí que “eras tú” y que habías rolado por muchos más lados… que fuiste niño, que reíste, que jugaste, que lloraste, que te convertiste en un joven, que estudiaste, que amaste, que has vivido… y yo no había estado ahí… pero eras tú! Y quise conocerte… y he disfrutado lo que se me ha permitido conocer.Ahora, contigo lejos, ya no busco: para mí sigues siendo el padre de mis hijos… hijos que tal vez nunca nazcan, hijos que tal vez, en unos años, cambien de rostro y no guarden ningún parecido contigo pero que en mi corazón tendrán algo de ti, hijos que tal vez no quieras conocer, pero tuyos al fin por ser parte de mí.Cosas raras: te dejo en paz no porque te olvide… sino porque quizá es mucha mi presunción de creerme tuya, de ti y ser justamente yo, así pues me guardo lo que siento percatándome de la realidad: no tengo dinero para ir hacia donde estás… no tengo los huevos para dejar todo por acá, es más: me enredo más en mis desmadres, pero al fin sigues existiendo y es lo que más me importa, no el que estés a mí lado, aunque sí, no lo niego, quisiera que estuvieras.Ahora bien, tu vida sigue transcurriendo tal como la mía: no te quedas atrás, estás haciendo lo tuyo y por ser precisamente tuyo te parece un sueño, no te quedas atrás y sé que te volveré a ver. Tal vez tardes mucho, pero que más da: sé que pasara. Una de mis motivaciones para hacer mis cosas es saber que tú las conocerás desde allá y será como si un pedacito de mí viajara a verte. Mientras tanto igual y siga sin ser yo… tal vez volveré a cambiar de nombre y entonces para ti me convierta en definitiva, tal vez me bautices “Mary”, pero mientras eso sucede puedo decirte, dirigiéndome al hombre y a la imagen que de él cree: yo también te extrañoDesde algún lugarYo
Y siguio diciendo Kaze motivando el comentario de Flo:
ResponderBorrar¿Sabes? Era como si me hubieran platicado que conocería a alguien con tales y cuales características y al encontrarlo encajaba pero venía adornado con otras tantas cosas… Imaginate que te dijeran que te dejaron un paquete en casa de alguien pero cuando fuiste a recogerlo ese alguien quiso llevártelo y se cruzaron en el camino por lo que tu paquete no te fue entregado. La persona se lo deja encargado a alguien en tu casa pero tu no vuelves a ella por mucho tiempo porque algo te paso camino allá. Entonces un niño encuentra el paquete y empieza a jugar con él y le desgarra la envoltura, un adulto se lo quita y lo pone donde nadie lo localiza inmediatamente,Después de un tiempo la persona que te dejo el paquete te pregunta que te ha parecido lo que te dejo, pero tú no has tenido en tus manos nada por lo que no tienes una respuesta. Entonces comienzan a describírtelo y tú te haces una idea de lo que es, te platicaron de cómo estaba envuelto, el tipo de caja y demás y empiezas por ahí. La cosa es que el paquete ha ido rolando por muchos lados y ha ido cambiando: la caja está abollada, ya no tiene envoltura, algo del contenido ya se rompió… y simplemente ya no encaja con la idea que tenias de él… ni al principio, pero ahora las descripciones más certeras para encontrarlo han desaparecido. ¿Qué pasaría si lo hallaras un día? ¿Tendrías la certeza de que es lo que buscas?Yo me he llenado de preguntas vanas y entonces pienso que todo lo que siento es producto de mi imaginación. Pero te encontré y descubrí que “eras tú” y que habías rolado por muchos más lados… que fuiste niño, que reíste, que jugaste, que lloraste, que te convertiste en un joven, que estudiaste, que amaste, que has vivido… y yo no había estado ahí… pero eras tú! Y quise conocerte… y he disfrutado lo que se me ha permitido conocer.Ahora, contigo lejos, ya no busco: para mí sigues siendo el padre de mis hijos… hijos que tal vez nunca nazcan, hijos que tal vez, en unos años, cambien de rostro y no guarden ningún parecido contigo pero que en mi corazón tendrán algo de ti, hijos que tal vez no quieras conocer, pero tuyos al fin por ser parte de mí.Cosas raras: te dejo en paz no porque te olvide… sino porque quizá es mucha mi presunción de creerme tuya, de ti y ser justamente yo, así pues me guardo lo que siento percatándome de la realidad: no tengo dinero para ir hacia donde estás… no tengo los huevos para dejar todo por acá, es más: me enredo más en mis desmadres, pero al fin sigues existiendo y es lo que más me importa, no el que estés a mí lado, aunque sí, no lo niego, quisiera que estuvieras.Ahora bien, tu vida sigue transcurriendo tal como la mía: no te quedas atrás, estás haciendo lo tuyo y por ser precisamente tuyo te parece un sueño, no te quedas atrás y sé que te volveré a ver. Tal vez tardes mucho, pero que más da: sé que pasara. Una de mis motivaciones para hacer mis cosas es saber que tú las conocerás desde allá y será como si un pedacito de mí viajara a verte. Mientras tanto igual y siga sin ser yo… tal vez volveré a cambiar de nombre y entonces para ti me convierta en definitiva, tal vez me bautices “Mary”, pero mientras eso sucede puedo decirte, dirigiéndome al hombre y a la imagen que de él cree: yo también te extrañoDesde algún lugarYo
¿Sabes? Era como si me hubieran platicado que conocería a alguien con tales y cuales características y al encontrarlo encajaba pero venía adornado con otras tantas cosas… Imaginate que te dijeran que te dejaron un paquete en casa de alguien pero cuando fuiste a recogerlo ese alguien quiso llevártelo y se cruzaron en el camino por lo que tu paquete no te fue entregado. La persona se lo deja encargado a alguien en tu casa pero tu no vuelves a ella por mucho tiempo porque algo te paso camino allá. Entonces un niño encuentra el paquete y empieza a jugar con él y le desgarra la envoltura, un adulto se lo quita y lo pone donde nadie lo localiza inmediatamente,Después de un tiempo la persona que te dejo el paquete te pregunta que te ha parecido lo que te dejo, pero tú no has tenido en tus manos nada por lo que no tienes una respuesta. Entonces comienzan a describírtelo y tú te haces una idea de lo que es, te platicaron de cómo estaba envuelto, el tipo de caja y demás y empiezas por ahí. La cosa es que el paquete ha ido rolando por muchos lados y ha ido cambiando: la caja está abollada, ya no tiene envoltura, algo del contenido ya se rompió… y simplemente ya no encaja con la idea que tenias de él… ni al principio, pero ahora las descripciones más certeras para encontrarlo han desaparecido. ¿Qué pasaría si lo hallaras un día? ¿Tendrías la certeza de que es lo que buscas?Yo me he llenado de preguntas vanas y entonces pienso que todo lo que siento es producto de mi imaginación. Pero te encontré y descubrí que “eras tú” y que habías rolado por muchos más lados… que fuiste niño, que reíste, que jugaste, que lloraste, que te convertiste en un joven, que estudiaste, que amaste, que has vivido… y yo no había estado ahí… pero eras tú! Y quise conocerte… y he disfrutado lo que se me ha permitido conocer.Ahora, contigo lejos, ya no busco: para mí sigues siendo el padre de mis hijos… hijos que tal vez nunca nazcan, hijos que tal vez, en unos años, cambien de rostro y no guarden ningún parecido contigo pero que en mi corazón tendrán algo de ti, hijos que tal vez no quieras conocer, pero tuyos al fin por ser parte de mí.Cosas raras: te dejo en paz no porque te olvide… sino porque quizá es mucha mi presunción de creerme tuya, de ti y ser justamente yo, así pues me guardo lo que siento percatándome de la realidad: no tengo dinero para ir hacia donde estás… no tengo los huevos para dejar todo por acá, es más: me enredo más en mis desmadres, pero al fin sigues existiendo y es lo que más me importa, no el que estés a mí lado, aunque sí, no lo niego, quisiera que estuvieras.Ahora bien, tu vida sigue transcurriendo tal como la mía: no te quedas atrás, estás haciendo lo tuyo y por ser precisamente tuyo te parece un sueño, no te quedas atrás y sé que te volveré a ver. Tal vez tardes mucho, pero que más da: sé que pasara. Una de mis motivaciones para hacer mis cosas es saber que tú las conocerás desde allá y será como si un pedacito de mí viajara a verte. Mientras tanto igual y siga sin ser yo… tal vez volveré a cambiar de nombre y entonces para ti me convierta en definitiva, tal vez me bautices “Mary”, pero mientras eso sucede puedo decirte, dirigiéndome al hombre y a la imagen que de él cree: yo también te extrañoDesde algún lugarYo
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